"El arte es un paso desde lo visible y conocido, hacia lo desconocido." Kalil Gibran

sábado, 24 de marzo de 2012

La nave del olvido

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El olvido. La conciencia es una herramienta muy poderosa, y sabe cuándo es el momento adecuado para abrirles la puerta a nuestros recuerdos. Muchas veces, esa conciencia, ha guardado datos, los ha encerrado con llave, a sabiendas de que, si los liberaba, podía significarnos un caos…pero allí están, siempre dispuestos a sorprendernos, agazapados, para aparecer y desencadenar alguna crisis. Diversos experimentos han demostrado que las memorias asociadas a una carga emocional intensa se consolidan mejor, por ejemplo todos recordamos qué estábamos haciendo cuando se sucedieron los ataques a las Torres Gemelas de Nueva York en el año 2001, pero sin embargo no recordamos donde dejamos las llaves del auto esta mañana!
Muchas veces, el poder olvidar es tan necesario como el poder recordar.
En el célebre cuento de Borges, “Funes el memorioso”, lo que se pone en cuestión,  no es tanto lo que el personaje Ireneo es capaz de recordar, sino, más bien, lo que es incapaz de olvidar. Según  el propio Borges,  esta obra es «una larga metáfora del insomnio», y su protagonista sufre del llamado “síndrome del sabio” ya que  si consideramos el sueño como un depurador de recuerdos,  al padecer de insomnio  no eliminamos esos  recuerdos y, por ende, somos incapaces de olvidar. “Más recuerdos tengo yo que los que habrán tenido todos los hombres desde que el mundo es mundo”, dice Funes,  y crea un sistema complicadísimo de numeración,  en el que a cada número le atribuye una cosa,  una especie de índice o de referencia interminable, que después él mismo termina por rechazar debido a su carácter absurdo:  No sólo le costaba comprender que el símbolo genérico 'perro' abarcara tantos individuos dispares de diversos tamaños y diversa forma; le molestaba que el perro de las tres y catorce (visto de perfil) tuviera el mismo nombre que el perro de las tres y cuarto (visto de frente).”  Borges  sostiene que, a fin de cuentas, Funes carece de la capacidad del pensamiento, porque “pensar es olvidar diferencias, es generalizar, abstraer. En el abarrotado mundo de Funes no hay sino detalles, casi inmediatos." En “Funes…”, Borges parece anticiparse al sistema cibernético, ya que plantea una visión del mundo en el que la memoria humana es un invaluable registro de los acontecimientos, como  en la actualidad lo es la web, una inagotable biblioteca de capacidad virtualmente ilimitada, en la que se ofrecen más información, más miradas y concepciones del mundo que no habían estado a disposición de nadie jamás.
En Wikipedia se define el olvido con este maravilloso juego de palabras: “Debemos recordar que uno recuerda que ha olvidado algo, es decir que sabe que tenía un conocimiento que ya no está allí, por lo tanto los recuerdos olvidados no desaparecen, sino que son sepultados en el inconsciente. Olvidar es una acción involuntaria que consiste en dejar de recordar.” Je!

6 comentarios:

Cayetano dijo...

Lo que ocurre es que a veces somos tremendamente selectivos en esto del recuerdo. Solemos recordar lo mejor y lo peor, muy a nuestro pesar. Y la gente muy mayor rememora cosas de cuando la guerra y eran jóvenes y no recuerdan qué comieron ayer.
Un saludo.

Patzy dijo...

Es verdad, tenemos una memoria selectiva...hace un tiempo había publicado un trabajo sobre el tema, lo borré! Je! Voy renovando mis diseños...pero al menos me acuerdo!!!! Jejej!!! Gracias Cayetano por tu presencia. Un abrazoooo

posicionamiento seo dijo...

excelente post.

Patzy dijo...

Muchas gracias!!! Un gusto recibirte por mi espacio, y una satisfacción que mi trabajo haya sido de tu interés y agrado. Abrazoooo

Pedro Garcia dijo...

Hay una parte del la desmemoria que me atrae; es lo que borra la costumbre, aquello que está permanentemente a tu lado y que de tanta, tantísima presencia, pasa al olvido. Un saludo Pedro.

Patzy dijo...

Pedro
Qué suerte poder leerte por aquí (y una pena que yo no pueda retribuirte los comentarios en tu blog...aunque paso por allí, al ebviar lo que escribo desaparece...me sucede con otros blogs amigos-no con todos-y no sé que por qué ha de ser así). Y respecto de lo que comentas...yo no creo que eso signifique que algo sea olvidado, sino que en realidad pasa a ser como familiar o habitual...está ahí, tu lo sabes, no lo percibes de manera distinguida, porque es algo más de siempre...pero si falta, ahí sí notas su ausencia, y aparece su recuerdo! No? de todas formas es interesante tu visión (como siempre)...Me la quedaré pensando!Un abrazoooo

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